Me tocó un boleto ganador: MCR
En reunión con la militancia priista, el precandidato aseguró que sólo se puede ganar escuchando.
Jesús María, Jalisco a 30 de diciembre de 2017.- Ser el precandidato priista al Gobierno de Jalisco no es ninguna rifa, es un boleto ganador, asegura Miguel Castro Reynoso, de gira por la región de Los Altos, en donde dice, encuentra una militancia unida, trabajando y espera que se convierta en una fuerza imparable hasta las próximas elecciones.
Ahora me toca dialogar con los militantes y simpatizantes, de quienes quiere escuchar de su partido y sobre todo, de lo que requieren, de lo que hace falta en sus comunidades para que llegado el momento, puedan ser parte de una estrategia de gobierno y se atiendan esos reclamos.
Miguel Castro se autodefine de sangre alteña, por su padre, Miguel Castro Barba, originario de San Ignacio Cerro Gordo y por ello señala que tiene un especial cariño por esta región, pero de ella como de todo Jalisco, “voy a tener mucha atención”, hay mucho trabajo por realizar y sobre todo, por aprovechar eficientemente un potencial de trabajo muy especial que tienen los alteños.
Pero ahora hay que escuchar a la gente, afirma, porque “sólo se puede gobernar escuchando”.
Castro Reynoso estuvo de visita en los municipios de Jesús María, Arandas y San Ignacio Cerro Gordo, a cuya militancia y simpatizantes pidió “que me ayuden, que me den la oportunidad de que trabajemos los próximos seis meses juntos y luego, tras las elecciones, seis años más”.
Destacó que los alteños son mujeres y hombres de trabajo, de bien, de fe, de fervor religioso y de familia, pero además por su sangre alteña (comentó en Jesús María), “comparto sus valores porque me siento uno más, orgulloso de mis raíces y de mis orígenes, porque son los que me han posibilitado trabajar, desarrollarme, vivir una formación en el trabajo y en el servicio y abrazar con cariño y devoción el servicio público”.
Y luego puntualizó: “De algo pueden estar seguros, soy creyente, soy católico, y no voy a permitir que lastimen la imagen y el respeto por las creencias que cada quien tiene, sean cual sean”.
En Arandas se refirió a la importancia de Jalisco a nivel nacional en materia agroalimentaria pero eso sólo producto de la dedicación en una zona en donde hay que hacer de las tierras flacas, centros productivos de alto rendimiento, pero eso se puede porque “somos gente de trabajo y de bien, acostumbrados a ir contra la adversidad, sabemos que nada puede vencer al trabajo permanente, constante, disciplinado”.
En san Ignacio Cerro Gordo indicó que dialoga con la militancia de su partido, consciente que requiere de todos para ganar. En este proceso requerimos de la base hacia arriba, de abajo hacia arriba, de buenos proyectos para consolidar al municipio y la región, para ganar el distrito, pero también juntos ir por Jalisco, empujar de manera fuerte y decidida.
Reiteró la propuesta de una campaña austera y una intensa agenda de trabajo, sin voltear a ver las agendas ajenas. Ahora lo único que le importa es la militancia y los simpatizantes.
Finalmente comentó que el priismo alteño se mantiene unido y trabajando, desde luego que no todos tienen la misma visión, pero ciertamente todos tienen el mismo interés, el triunfo.