Chapala del cinismo de un fraude anunciado
Sin un pelo de…
Por Sergio Villa Pérez
Chapala es un centro turístico de fama internacional, domicilio de miles de extranjeros por su clima benevolente, sin embargo, la jornada electoral atrajo la ambición de un grupo de políticos que se incrustaron en el Partido Movimiento Ciudadano para contender por la presidencia municipal encabezados por Moisés Alejandro Anaya.
La estrategia de Movimiento Ciudadano contempló el uso de los recursos del estado por la evidente complacencia de estructuras estatales en apoyo a las acciones del candidato de MC; policías del estado que arrestaron a militantes de otros partidos por llevar a cabo pega de propaganda.
La victimización de Moisés por un supuesto atentado en su contra y que fue calificado como un ataque del PRI a su persona, pero que desde el inicio se vio como un plan para generar la reacción del equipo de Javier Degollado en su contra al grado que los naranjas consiguieron las órdenes de aprehensión en contra de los tricolores, antes de que la autoridad correspondiente las ejecutara.
Hoy el representante del PRI en el Consejo Municipal Antonio Bernabé Manzano Uribe muestra evidencias de un proceso electoral llevado a cabo bajo la premisa de violar la ley cínicamente, ausencia de actas, paquetes electorales desaparecidos y aparecidos, sustitución de autoridades electorales y de actas de cómputo que está debidamente documentado.
En el municipio de Chapala se instalaron 60 casillas ordinarias y dos especiales; el consejo municipal exhibió 62 recibos de sustitución de actas de la jornada electoral, 17 paquetes electorales con tiquetes electrónicos sin firma del consejero autorizado para recibir, 37 paquetes electorales con recibos de forma manual, 12 recibos electorales con alteraciones, 18 falsificados.
Explica el abogado que al inicio de la sesión de cómputo en el consejo municipal sólo había 53 paquetes electorales, faltaban 9; al reclamar a la presidenta del consejo Rosa Angélica Cazares Alvarado aseguró que el resto estaba en la bodega, los mando traer a la sesión y llegaron 13, ya había 4 de más.
Evidencias así sólo demuestran que hubo una autoridad electoral que permitió que los naranjas resultaron ser más capaces para violar la ley, pues Cazares Alvarado ya había sido presidenta de consejo y no se puede argumentar ignorancia, menos inoperancia; parece más cinismo para engañar a un pueblo que cree en la democracia.