Giras presidenciales para encubrir Coronavirus y pobreza
Por Salvador Mateo, vocero del Movimiento Antorchista en Jalisco
En medio de la crisis sanitaria, económica y social ocasionadas por la pandemia del Coronavirus que están azotando a nuestro país, el presidente Andrés Manuel López Obrador, se prepara para reiniciar sus giras por el país, las que se vio obligado a suspender sólo hasta cuando ya se había declarado la fase 2 de la pandemia y la enfermedad causada por el COVID-19 había sido reconocida como una enfermedad grave de atención prioritaria. Durante toda la fase 1, AMLO mantuvo sus giras con mítines a los que acudían cientos de pobladores, a los que solía abrazar, besar y morder los cachetes de las niñas que le arrimaban los asistentes, atrevimientos repugnantes que le valieron al presidente criticas incluso de medios internacionales.
El pueblo de México tiene hambre debido a que millones de trabajadores se encuentran sin ingresos por la parálisis económica y están confinados en sus casas por la contingencia sanitaria, pero el mandatario federal no tiene pensado llevar alimentos a las familias más necesitadas, pues de acuerdo a sus declaraciones, realizará eventos para dar banderazos a las obras del Tren Maya y visitar las refinerías, obras sumamente costosas, de dudosa viabilidad cuyas construcciones podrían posponerse ya que, no tienen nada que ver con lo que se requiere para atender la emergencia alimentaria y de sanidad que ha traído la triple crisis por la que atraviesa nuestro país.
A pesar de lo anterior, los defensores gratuitos o por encargo de López Obrador alegarán que el presidente de la 4T se apresta a enfrentar la caída del empleo y generar desarrollo económico, tal y como viene anunciando todos los días en los planes que según él tiene y va a generar 2 millones de empleos terminando la contingencia sanitaria. ¿Pero cuantos empleos serán generados con las millonarias obras? Cuando el mismo AMLO asegura que la construcción de los primeros cinco tramos del Tren Maya se van a generar en este año 80,000 empleos y "una derrama económica de 35,000 millones de pesos en los estados del sureste del país"; la megaobra energética de Dos Bocas generará 23,000 empleos directos y 112,000 indirectos, ósea, 135 mil empleos de acuerdo a lo revelado por la secretaria de Energía, Rocío Nahle; hasta el momento la construcción del nuevo Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles en la Base Aérea de Santa Lucía, ha generado un total de 12 mil 627 empleos civiles. Lo que da una suma de apenas 227, 269 empleos.
El panorama laboral de nuestro país es lamentable, el mismo mandatario federal reconoce que tan solo entre los meses de marzo y abril se perdieron 500 mil empleos, con lo cual los mexicanos que antes de la pandemia y de la 4T no conocían la pobreza, ahora sufren necesidades elementales, en especial de alimentos. Veamos unos datos reveladores: la Encuesta de Seguimiento de los Efectos del covid-19 en el Bienestar de los Hogares Mexicanos reveló que entre 5.2 y 8.1 millones de mexicanos perdieron su empleo, no pudieron salir por ingresos o "fueron descansados" por sus empresas ante la pandemia. Los hallazgos de la investigación contrastan con las declaraciones del presidente Andrés Manuel López Obrador, quien afirmó que la ola de despidos "se detuvo”. En la misma encuesta, el 46 por ciento de los hogares reportaron tener "los recursos necesarios" para cumplir las medidas de distanciamiento social hasta el 30 de abril. Un drama, que la epidemia va a empeorar ya que: el organismo público que mide el desarrollo del país calcula que la penuria alcanzará a 10 millones de personas más.
El presidente de la 4T, Andrés Manuel López Obrador está inmerso en una carrera, fantástica, por situar la pandemia entre sus logros políticos y encubrir con ello el desastre económico pronosticado y los casos de Coronavirus que siguen incrementando, el gobierno federal atrapado por los pronósticos de un mayor incremento de la pobreza, ha presentado en mitad de la semana crítica de contagios y muertes un plan inconcreto, inacabado, para ir volviendo a la vida normal en el país, después de días de confinamiento en casa y la economía en estado de coma.
Expertos en ciencias económicas y sociales, nacionales e internacionales coinciden en señalar que, atrás de todas las medidas de “recuperación económica” de AMLO hay una realidad determinante, y saciar el hambre de acumulación de la riqueza en manos de una elite, a la que está aliado López Obrador aquí en México y en Estados Unidos, a los que no quiso otorgar ningún incentivo fiscal, a costa de poner en riesgo la salud y la vida misma de los trabajadores a quienes ahora, les autoriza salir del confinamiento para no gastar en apoyos. Las giras presidenciales servirán “como un anillo al dedo” para encubrir los casos de Coronavirus y la pobreza en que caerán otros 10 millones de mexicanos. No puede haber otra explicación.