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[if !supportLists]· [endif]Precuela a prueba del tiempo llena de misterio, terror, suspenso y escrita a cuatro manos por Dacre Stoker y J.D. Barker

Por Mario Díaz (El Master)

Pasaron más de 120 años y el vampiro más famoso de la literatura regresa de nueva cuenta como si su inmortal alma decidiera que es el tiempo de regresar del mundo de los no muertos volver con su aterradora sed de sangre para recordarnos a los simples mortales que un peligro inconmensurable ronda entre nosotros.

En esta novela que bajo el sello de Editorial Planeta deambula desde finales del año pasado por las librerías, encontramos a Bram Stoker, el creador del conde Drácula, en una etapa de juventud, se tiene el conocimiento que su infancia fue difícil siempre aquejado de enfermedades que lo tienen postrado en su hogar.

Una noche, la fiebre que le asalta casi a diario lo lleva a las puertas de la muerte.

Su niñera, Ellen Crone, echa a todo el mundo de la habitación del pequeño y lo salva por medios que nadie conoce. Tras este episodio Bram se recupera, y crece su fascinación por Ellen. Él y su hermana Matilda descubren cosas muy extrañas de la niñera y antes de que puedan hablar con ella, ésta desaparece de sus vidas… Obsesionado con ella, quince años más tarde los hermanos vuelven a reunirse para encontrarla y sus caminos se cruzan con el del Conde Drácula...

Inspirada por notas y textos escritos por el propio Stoker, la precuela de Drácula revela no sólo el origen de Drácula y el de Bram Stoker, sino la historia de la enigmática mujer que les conecta.

El ambiente es el idóneo una Irlanda entre 1845 y 1849 país que al igual que el resto de Europa se encontraba bajo la presión de una crisis humanitaria en donde morir por hambre era asunto que a diario se sufría.

La oscuridad de la noche es el telón idóneo en donde los personajes deambulan en busca de respuestas, el lector volverá a la fascinante indiscreción de entender esta trama leyendo los diarios del joven escritos aunque también mediante las cartas que se envían, textos epistolares que dieron forma a Drácula de Bram Stoker.

El escritor tiene 21 años al momento de vivir su más larga noche en donde Stoker se mantiene cautivo dentro de una habitación para evitar ser presa de lo que se encuentra rondando el exterior de su claustro o pudiera ser para evitar que algo o ese alguien que se encuentra junto al escritor quede en libertad.